El control preciso de la humedad del aire garantiza una mayor eficiencia en el proceso, una reducción de las paradas de las máquinas y de los residuos de material y una mayor calidad del producto final.
El papel es, en efecto, un material higroscópico, extremadamente sensible a las variaciones de humedad. Cuando el aire es demasiado seco, la parte superficial tiende a replegarse, mientras que la central mantiene su humedad. De esta forma el papel se deforma, arrugándose y obstaculizando el correcto funcionamiento de las máquinas. En el proceso de coloración, el cambio en las dimensiones del papel causa errores en el encuadre de la prensa, que se traducen en un desalineamiento en la tirada del color.
Otro problema relevante causado por un aire demasiado seco es la formación de cargas electrostáticas durante el arrastre del papel. Se considera que máquinas normales para la prensa diaria pueden llegar hasta a 2.000.000 Voltios!! Este fenómeno causa la adhesión electrostática de las hojas de papel, que hace difícil su separación, con el riesgo de dañar el producto.
Mantener la humedad relativa del aire entre el 50-60% permite limitar la deformación y ondulación de las hojas, eliminar la acumulación de cargas electrostáticas, limitando los descartes y garantizando una productividad constante.
CAREL, gracias a sus más de 40 años de experiencia, propone una amplia gama de humidificadores a vapor o adiabáticos. Los sistemas adiabáticos, en particular, son tecnologías de vanguardia que permiten controlar la humedad y al mismo tiempo refrescar el aire, garantizando el mínimo consumo de energía. Funcionan nebulizando el agua en millones de finísimas gotitas que se evaporan espontáneamente absorbiendo calor del aire que, como consecuencia, se enfría. Se trata de una tecnología particularmente eficiente en aplicaciones como la tipográfica, donde las máquinas desarrollan mucho calor. Además, son sistemas de ahorro energético, apenas consumen 4W de potencia por litro de agua nebulizado, un 1% respecto a un humidificador de vapor común.
Controlar la humedad del aire en la industria tipográfica es necesario para: